El desarrollo futuro estará sustentado en energía renovable y gas natural

Con esto como norte, EGE Haina ha desarrollado una estrategia de crecimiento a 2030 que contempla el desarrollo 1,000 nuevos MW de generación renovable y unos 400 MWs a gas natural.

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De los 3,454 nuevos megavatios instalados en el país desde el año 2011, EGE Haina ha desarrollado y opera casi el 34% de esa capacidad agregada, lo que muestra el firme compromiso de la empresa de apoyar la transición energética de la Republica Dominicana en su avance hacia la sostenibilidad.

 

Desde su creación en octubre de 1999, la empresa ha invertido cerca de 1,300 millones de dólares en centrales de generación eléctrica. Ha desarrollado cuatro parques eólicos: Los Cocos I y II, Larimar I y II; y tres proyectos solares fotovoltaicos: Quisqueya Solar, Girasol y Esperanza. Entre todos suman 387 megavatios instalados de energía limpia. En términos medioambientales, esta capacidad instalada contribuye a evitar anualmente la emisión a la atmósfera de 600,000 toneladas de CO2e y ahorra la importación de 1,350,000 barriles de petróleo al año.

 

En 2022 EGE Haina produjo alrededor del 13 % de la energía utilizada por el Sistema Eléctrico Interconectado Nacional (SENI), incluyendo el 24 % de la energía utilizada por los Usuarios No Regulados (UNR). También, produjo la totalidad de la energía que consume el sistema aislado de Pedernales; y entregó parte de la energía eléctrica que requirió el Consorcio Energético Punta Cana-Macao para su zona de concesión.

 

“En poco más de una década, hemos más que duplicado nuestra capacidad instalada y, a la vez, hemos reducido a menos de la mitad nuestras emisiones por cada kilovatio hora producido. Esto ha sido posible por medio de la transformación de nuestra matriz de generación de electricidad. Pasamos de ser una empresa 100% térmica, dominada por combustibles fósiles, a tener una flota diversificada, en la cual las energías renovables no convencionales (eólica y solar), sumadas al gas natural, alcanzan ya un 72 % de nuestra capacidad”, explica José A. Rodríguez Silvestre, gerente general de la empresa.

 

El ingeniería eléctrico Rodríguez Silvestre ha estado en la empresa desde 2006, donde anteriormente se desempeñó como director de desarrollo senior, supervisando el desarrollo de proyectos y de nuevos negocios para la empresa, y ha tenido responsabilidades directas en la gestión exitosa de nuevas inversiones en infraestructura que resultaron en más de 1,000 MW de generación renovable y convencional.

 

Hoy, señala, EGE Haina “cuenta con una capacidad instalada de generación propia de 1,135 megavatios (MW) con una matriz diversificada, capaz de generar electricidad con gas natural (38 %), renovables (eólica y solar – 34 %), fueloil (23 %) y carbón (5 %)”.

 

Coméntenos acerca del Parque Solar Sajoma, ¿Cuánto es la inversión del proyecto, su impacto en el Sistema Eléctrico Nacional?

El Parque Solar Sajoma será la tercera central de energía solar más grande de la República Dominicana, precedido por los parques solares Girasol y Esperanza, ambos de EGE Haina.

 

Este parque requerirá una inversión aproximada de 85 millones de dólares y se extenderá sobre un terreno de 140 hectáreas, en el municipio de San José de las Matas, provincia de Santiago. Tendrá una capacidad instalada pico de 80 MWp, que permitirá producir anualmente 148,000 MWh, suficientes para abastecer la demanda de unos 60,000 hogares.

 

A su vez, esta nueva central evitará la importación de aproximadamente 210,000 barriles de petróleo y la emisión a la atmósfera de 90,000 toneladas de CO₂ cada año.

 

Otra característica del Parque Solar Sajoma es que comprenderá una subestación, una línea de transmisión de doble circuito de 14.6 km de longitud, así como la adecuación de dos campos de línea en la subestación Naranjo de 138 kV / 345 kV.

 

Siba es un proyecto que comenzó este año sus operaciones. En su primera fase, cuenta con una capacidad instalada de 210 megavatios. ¿Qué aspectos contemplan las siguientes fases el proyecto? ¿Cuál será su papel y capacidad en la generación de energía de cara al futuro?

Cabe puntualizar que Siba Energy es propiedad del consorcio SIBA Energy Corporation, integrado por la Empresa Generadora de Electricidad Haina (EGE Haina), SGN Energía y Monte Río Power Corporation, empresas nacionales con larga trayectoria en los mercados eléctricos y de energía.

 

Esta central está ubicada en el municipio Boca Chica, cuenta con 12 turbinas a gas natural, con capacidad de operar alternativamente con diésel e hidrógeno. Su desarrollo requirió una inversión de 225 millones de dólares e inició sus operaciones en 2023.

 

La segunda fase de este proyecto, que consiste en el desarrollo del ciclo combinado de esta central termoeléctrica a gas natural y tendrá un costo adicional de más de 150 millones de dólares. Alcanzará una capacidad de hasta 280 megavatios como resultado de la producción de energía suplementaria derivada de la recuperación del calor que escapa de las turbinas.

 

Con relación a su papel en la generación de energía de cara al futuro, debo resaltar que la rápida capacidad de arranque de Siba Energy, combinada con su flexibilidad para operar en bloques, le permiten contribuir al abastecimiento de la creciente demanda de electricidad en la República Dominicana, a la vez que complementa la generación de las energías renovables y brinda potencia y energía de reserva ante fallas y mantenimientos programados de otras centrales. 

 

EGE Haina recibió el premio como “Pionero en Bonos Verdes de la República Dominicana”, ¿Cuál es el compromiso que asumió la empresa al ser la primera en el país en ofrecer bonos vinculados a la sostenibilidad?

Históricamente EGE Haina ha sido uno de los principales emisores privados del mercado de valores local. De hecho, se ha convertido en el principal emisor privado no financiero de bonos corporativos en el mercado local de capitales, donde ha sido pionera en el tipo de emisiones verdes o sostenibles, que representaban una oportunidad de vincular nuestra estrategia general con nuestra estrategia de financiamiento y, paralelamente, aportar al desarrollo del mercado local de estos instrumentos.

 

Basado en una de sus centrales renovables, se convirtió en la primera compañía dominicana en constituir un fideicomiso de emisiones de valores de renta fija de impacto medioambiental (bonos verdes), por un monto total de 100 millones de dólares.

 

También emitimos bonos internacionales vinculados a la sostenibilidad por un valor de 300 millones de dólares, que representa la primera emisión de un bono de este tipo (Sustainability-linked Bond o SLB, por sus siglas en inglés) para una empresa dominicana, tanto en el mercado local como internacional, y uno de los primeros SLB corporativos en la región. Por la emisión de estos bonos, la empresa ha sido reconocida en el país y el extranjero.

 

Ese Marco de Financiamientos Vinculado a la Sostenibilidad, está basado en el objetivo de la compañía de lograr una capacidad instalada renovable de 526.5 MW para el 31 de diciembre de 2026, que equivale a un aumento de alrededor de un 200 % de la capacidad renovable de la empresa, en comparación con la línea de base del 31 de diciembre de 2020.

 

En EGE Haina continuaremos innovando con iniciativas que impulsen la transición hacia una economía verde y que promuevan el desarrollo de nuevos proyectos renovables.

 

¿Qué retos tiene este tipo de instrumento financiero en el país?

Uno de los desafíos en la emisión de Bonos Verdes es su elevado costo en términos de tiempo y recursos, tales como contratación de asesores especializados en la materia y la realización de auditorías independientes para asegurar el cumplimiento de los estándares establecidos y garantizar el éxito de una colocación de oferta pública de valores.

 

En su opinión, ¿qué incentivos o políticas públicas se requieren para continuar dando impulso a la transición energética nacional?

  • Continuar con la estabilidad regulatoria, promoción y apoyo por parte del estado que fomente nuevas inversiones en el sector eléctrico. En este sentido es vital, ante todo, mantener los incentivos a las energías renovables no convencionales incluidos en la Ley 57-07. Eliminar los incentivos impositivos a los proyectos renovables traería consecuencias devastadoras para los proyectos solares y eólicos, pues representaría un incremento entre de un 20 % y un 38 % en el costo de los proyectos, mermarían las inversiones en renovables, no se conseguiría el objetivo de una disminución del precio de la energía, y se afectaría la meta del Estado Dominicano de alcanzar 25 % de energía renovable al 2025, y 30% al 2030, en la matriz eléctrica.

 

  • Además, se requiere contar con una planificación indicativa oportuna de la oferta y demanda energética del país y del subsector eléctrico, que permita realizar las inversiones requeridas a tiempo y que priorice la expansión oportuna de la red de transmisión y distribución eléctrica, acorde con el desarrollo económico y energético geográfico.

 

  • Apremia, asimismo, mejorar la condición económica de las empresas distribuidoras, afectadas por elevadas pérdidas de energía, a través de una mejora en su eficiencia operativa.

 

  • Se precisa asegurar la calidad, estabilidad y seguridad en la oferta de electricidad, principalmente en los periodos de alta demanda, proveyendo las señales económicas adecuadas para una mayor diversificación en la oferta, incluyendo unidades de rápida respuesta que puedan atender estos picos de demanda.

 

  • Se requiere también mejorar la divulgación oportuna de la información sectorial (Gobierno, estadistas, generadores, distribuidores, público general, etc.); y contar con cooperación regional e internacional que promueva la aplicación de mejores prácticas para desarrollar la sostenibilidad y confiabilidad del sector. 

 

  • Otro aspecto que incentivar es una cultura de eficiencia energética, mediante el establecimiento de precios que reflejen el verdadero costo de los recursos, y eviten el mal uso de la energía. 

Tenemos claro el camino y avanzamos a muy buen ritmo en nuestro plan de crecimiento con una visión de sostenibilidad integral.