IV Edición: Recursos energéticos & mineros

Ecuador tiene oportunidades enormes para avanzar hacia la convergencia tecnológica

Sin embargo, el país aún permanece en un ranking no adecuado, según explica el especialista, que restringe las posibilidades de transformación digital 

Desde su experiencia, el ingeniero Jaime Albuja ha tenido la oportunidad de combinar su carrera profesional en los ámbitos público, privado y académico, a nivel ciudad, país y región, así como experiencias globales en Estados Unidos, Europa y Asia.

Está convencido de que la globalización y las tecnologías de información y comunicación (TIC) son oportunidades que alientan a romper paradigmas, acelerar los cambios y generar beneficios en los contextos de desarrollo.

Dentro de su carrera, un factor preponderante, ha sido el buscar el conocimiento donde esté disponible, tener curiosidad sobre muchos aspectos del desarrollo humano como el arte, la economía y la tecnología, así como rodearse de personas con mayores conocimientos que el propio y de varias latitudes.

Asegura que intenta creer que es un profesional con potencial global que no olvida su origen ni los retos de la región a la que pertenece. Es un soñador incansable, convencido que, en esta época, todo es posible en un entorno de tecnología, innovación y comercio.

 

¿Considera que el liderazgo responsable y el desarrollo económico están relacionados?

Los liderazgos son indispensables para trazar una ruta y una visión a seguir, sin embargo, los líderes no son nada sin equipos extraordinarios dispuestos a dar los kilómetros extras necesarios para hacer que las cosas pasen.

El desarrollo económico, en gran medida, depende de factores de gestión más que solo disponer de recursos como tecnología o dinero, el líder debe estar dispuesto a aceptar los triunfos de los equipos y, sobre todo, enfrentar los errores del personal a su cargo, así como impulsarlo a ser más, retándolos para explotar la mayor de sus capacidades.

La escucha activa, recibir consejos, ideas y propuestas de los subordinados de forma amplia y abierta siempre será una buena práctica. Mucha de la evidencia empírica en desarrollo menciona líderes que usan estas prácticas que están acompañadas de equipos con conocimientos mayores y complementarios.

El líder es un entusiasta incansable que promueve el equipo, lo ilusiona, lo entiende y es empático con sus circunstancias, generando un entorno de confianza indispensable para cualquier desarrollo económico.

El crecimiento de los países requiere liderazgos con altos valores humanos que no pueden ser quebrantados, como honestidad y respeto. Finalmente, el desarrollo demanda liderazgos continuos, como una siembra consecutiva que permita un desarrollo sustentable.

 

Desde su perspectiva, ¿cómo se encuentra el Ecuador en cuanto a la transformación digital?

El Ecuador tiene oportunidades enormes para dar pasos hacia la convergencia tecnológica, la convergencia se refiere a tener un nivel similar a economías consideradas de mayor desarrollo, sin embargo, la tecnología en general es una constante disponible para cualquier economía.

Por ejemplo, el lanzamiento de un nuevo teléfono inteligente se puede dar tanto en América Latina como Asia o Europa al mismo tiempo, esto gracias al comercio y a los flujos de información globales. Es indispensable enfocar los esfuerzos de mejora de entorno medidos en indicadores, como el doing business que arrojan, en cierto sentido, la salud para hacer negocios en una economía.

Ecuador aún permanece en un ranking no adecuado que restringe las posibilidades de transformación digital. El entorno es indispensable para el desarrollo, países como Ruanda con situaciones extremas que han vivido como guerras civiles, han logrado mejorar su entorno de negocios hasta lograr estar dentro de los 50 mejores del mundo.

Ecuador tiene mejores condiciones para lograr esta convergencia, es importante mencionar que el entorno de negocios es un paso previo a la apropiación de tecnología en todos los sectores y debe ser mejorado, tanto a nivel nacional, como a nivel ciudad.  Indicadores como el NRI y el IDI, cuantifican el nivel de desarrollo digital de las economías, para el caso de Ecuador está en la mitad del ranking, sin cambios importantes en los últimos 20 años, así como la necesidad del cambio en el doing business, la convergencia en estos dos indicadores se puede materializar en una agenda de transformación digital país que se enfoque en la mejora de los indicadores, dando como resultado un entorno adecuado para transformación digital.

 

Dirigió el centro virtual de formación ALADI, ¿podría comentarnos aspectos relevantes de este proyecto? ¿Qué cursos ofrecen en la actualidad y quiénes pueden acceder a ellos?

Trabajé en ALADI desde el año 2015 al año 2019, donde me hice cargo del Centro de Formación de ALADI, la transición en mi gestión se dio por dos grandes hitos, el primero la transformación, de contenidos de ser planos a convertirlos interactivos, funcionales y 100 % virtuales para los usuarios interesados en la integración comercial y temas relacionados con exportaciones e importaciones; el segundo hito fue lo relacionado a  la apertura del centro a toda la ciudadanía de los 13 países miembros.

Esto resultó en un crecimiento de alrededor de 300 alumnos a 10.000 y, actualmente, a más de 30.000, que el centro sirve con conocimiento especializado en área de comercio como nomenclatura arancelaria, origen de mercancías o logística.

 

Usted propuso un proyecto emblema de internacionalización de pymes; coméntenos, ¿cómo han sido beneficiadas las industrias productivas agrícolas y la manufactura ligera?

En el mismo periodo de ALADI, junto con cooperación de FAO, se propuso el reto de internacionalizar al eslabón más débil de la cadena de valor agrícola, realizando una experiencia con varia MiPymes y organizaciones de la agricultura familiar que puedan buscar en la internacionalización de sus productos, mejores oportunidades de desarrollo, así como transferencia de conocimiento para mejora de producción.

La experiencia de capacitación se complementó con ruedas de negocios e información, y datos de comercio que ayudaron a sensibilizar sobre las oportunidades de la agricultura y el comercio exterior. El proyecto ha sido replicado en varias economías y regiones extra ALADI, como es el caso de Centroamérica. Un tema a destacar fue la generación de la metodología ágil denominada CANVAS X como una herramienta ágil de exportaciones.

 

Desde su experiencia, ¿qué tan importante es que las empresas tengan claro el concepto de reinvención?

La innovación es un factor necesario, pero no suficiente para la supervivencia de cualquier emprendimiento o empresa, los momentos volátiles, inciertos, complejos y ambiguos (VUCA), la reinvención es más importante, ya que los ciclos de vida de los productos y servicios son más cortos, además de cambios bruscos en las tendencias de mercado, significando posibles reducciones de demanda, la reinvención también demanda cambios de paradigmas a nivel gerencial y, además, incluir nuevas habilidades en el personal de la empresa.

La reinvención tiene un aliado fundamental, que son los datos de mercado, generados o adquiridos, que permiten a la empresa tener una mejor claridad sobre la innovación en productos, producción o mercados. Otras metodologías como el design hinking podrían ser aplicadas para testear propuestas de valor en tiempos menores, sin embargo, los datos siempre ayudarán a reducir los riesgos o los costos de la reinvención.

 

¿Qué aspectos y experiencia resalta de su trayectoria profesional?

Es importante conectar cada experiencia laboral hacia el desarrollo de nuevos retos, cada experiencia se conecta con la siguiente y la potencia. En mi caso, estoy agradecido de haber tenido esta conexión de manera continua. Desde mi primera experiencia laboral en el sector financiero privado en Ecuador, donde me permitió conocer las necesidades y retos de algunos sectores económicos del país, como también mi paso por el proyecto del nuevo aeropuerto de Quito, así como mi paso por la creación y propuestas de políticas de comercio y tecnología para Ecuador.

También el haber sido parte de los grandes retos de integración latinoamericana y desarrollo de la región ALADI. Debo comentar que la academia siempre ha estado presente como aliado que me ha acompañado de forma paralela al desarrollo de mis retos profesionales.

Hoy en día, me desempeño en las áreas de innovación, donde el panorama pinta extraordinario dadas las condiciones de datos, tecnología y sectores que entienden que el poscovid también genera oportunidades para los que estén alertas y dispuestos a dar lo mejor de sí en momentos difíciles.

Mis experiencias laborales también han contado con maestros y mentores, los cuales han proyectado en mí sus experiencias y consejos, convirtiéndome en el profesional que hoy en día soy. El futuro, si bien incierto, seguramente traerá mayores retos profesionales y humanos, buscando ser más útil donde el destino disponga.